" EL PAISAJE ROMPERÁ EL ÚNICO RECUERDO DE AYER QUE TE QUEDE EN LA RECÁMARA "

Siempre que viajo o he viajado a algún pueblo o ciudad he tenido la costumbre de pararme en los escaparates de las Inmobiliarias y también la de preguntar por un buen restaurante en la zona a la estanquera/o. Lo segundo no se porque razón pero lo de las inmobiliarias tiene una intencionalidad : " sondear el poder adquisitivo del lugar que estoy visitando". A través de esto llego a muchas claves cuando trato de analizar en su conjunto la zona o región en la que me encuentro. Tiene un poco de cultura general y otro tanto de interés periodístico si quiero escribir sobre cualquier cosa que me llame la atención. Pero es que ademas cuando camino visitando el lugar me fijo en los carteles de " Se Vende "  o " Se Traspasa "  que hay colgados en los balcones o pegados en locales de todo tipo ya cerrados.

Este año he seguido la estela del Camino de Santiago desde Bilbao. He atravesado los paramos ardientes de Castilla hasta comenzar a vislumbrar las montañas bercianas mientras llegaba a Ponferrada la ciudad/pueblo que me vio nacer. Apenas viví tres años en mi adolescencia pero siempre que tengo ocasión me acerco a dar una vuelta nostálgica. La cosa es que después me convierto en un "abuelo cebolleta" recordando aquella ciudad oscura por el carbón y ver en la ciudad que se ha convertido por culpa del mismo. Hablo de treinta y cinco años atrás mas o menos, cuando además de rica nacieron los pijos que tomaban café y vermout en el San Remo. Y así poco a poco pija se quedo. Después llego la opulencia y la apariencia y se hizo cargo de casi todos/as. Fue entonces cuando el rebaño de los elegidos comenzó a jugar a ver quien la tenia mas grande.

La ciudad "creció por encima de sus posibilidades " y lo ultimo del mercado llegaba a las tiendas. Las parejas se casaban muy jóvenes y comenzaban a traer seres humanos a destajo mientras el mercado del ladrillo crecía disparatadamente y donde muchos terminaron de enriquecerse. Por su ayuntamiento pasaron casi todas las siglas aunque la ciudad siempre fue muy de derechas. Llegaron los insurgentes, los soñadores pero también se mancharon. Hoy estremece poder observar como se ha expandido por los cuatro costados. Todos son casas, chalets, centros comerciales, tiendas y marcas a pie de carretera. Parece una ciudad de alto standing hasta que te paras a charlar con alguien y te cuenta lo jodidamente mal que esta todo. El carbón ya no es el maná que era y la zona apenas tiene industria. El paro y la falta de expectativas a corto y medio plazo son mas que evidentes. Solo ver la cantidad de negocios cerrados o con el cartel de traspaso te da una pequeña idea de la situación.

Esto mismo lo he apreciado en la mayoría de pueblos y ciudades de Castilla, de León y de Galicia. Es como si la decadencia y la inanición fuera tomando posiciones para darnos la ultima estocada. Lo mas impresionante es cuando hablas con la gente del lugar y notas la derrota en los silencios de su argumento. La globalización esta presente ya en cada rincón y en todas sus versiones mientras los viejos y los pueblos se mueren sin dejar huella. Nada nunca sera como era y el paisaje romperá el único recuerdo que te quede en la recamara porque la Era esta pariendo y se deja  notar timidamente. Esta sensación fascina y acojona ...