Un día como hoy 22 de Marzo pero de 1957 llegue a este mundo estúpido, en este lugar ahora viejo y deteriorado por el paso del tiempo, entonces era un club ( Chilibrin ) así se llamaba el prostíbulo donde mi madre ( Azucena ) la que esta conmigo en esta otra fotografía, se refugio del hambre y encontró calor humano posiblemente. La vida de esa mujer fue como la de muchas mujeres de ahora mismo con la diferencia de haber vivido la trashumancia de la guerra por varias ciudades de España. Se busco la vida como pudo y vivió hasta 1991. No la lloré como madre porque apenas viví con ella, pero lo hice como alguien que admiraba a esa mujer por su vida y su duro pasado.
Hoy después del tiempo, en ocasiones y cuando la congoja se acerca a la garganta navegando por toda mi vida hasta la fecha me emociono y se desprenden por mi cara lágrimas furtivas e incontrolables que me hacen sentir que todavía soy humano. A pesar de los contextos y la dureza de los caminos hasta llegar a este mismo día que escribo sigo vivo. Confieso que mi vida es de libro, de Bet Seller, posiblemente como la tuya o parecida. Pero hoy, cuando han pasado 64 años y a pesar de la dureza vivida por muchísimas razones dolorosas e indignantes, me siento realizado en mi mismo. En haber superado la soledad, el dolor, la enfermedad y la procedencia en todos sus rincones, no gratuitamente. Y haber sido capaz de sentirme pleno en mi autoestima de la cual he presumido siempre. Superé con creces los que para mi son los tres objetivos mas importantes de un ser humano en mi situación y en la de cualquiera actualmente : Conocerse, Aceptarse y Quererse y por supuesto tener siempre presente que lo mas importante eres tu, después tu y luego, tu también. Algunos pensaran que esa postura es egoísta y están en lo cierto ¿ Y ?. Soy egocéntrico y así lo he manifestado sin rubor en mas de una ocasión. Cuando tienes todo eso que he señalado, eres invencible ante cualquier revés que a estas alturas te de la vida. También en mas de una ocasión he confesado que estos años vividos los elevo al cubo porque cada año vivido no han sido los establecidos por el calendario. Han sido mucho mas intensos sin guiones sin horas sin fronteras, sin complejos, sin prejuicios. Por eso confieso que he vivido. En estos años los oficios y los trabajos han sido variados desde la infancia adolescente : Repartidor de leche, de pastelería, chico de almacén de ropa de señoras, mecánico joyero, camarero, locutor de radio, colaborador de tv, delegado de multinacionales de cine y de videojuegos, responsable de suscripciones de un diario estatal, masajista de club, trapichero, comercial de cine porno y chófer de ayuda social.
A los 50 me quede sin trabajo por despido de la red de ventas para la empresa que trabajaba y ahora soy perceptor por Derecho de una RGI y aunque no me da para ahorrar ( cosa que nunca hice ) si me da para vivir. Además, las cosas están tan desquiciadas y tan salidas de contexto que los argumentos de muchos es que eres como mínimo sospechoso de algo. Y por supuesto delincuente de todo. Y entonces es cuando uno piensa ¡¡ que honrados son los señaladores ¡¡ . Estoy seguro que son pulcros y ciudadanos de buena conducta que jamás se han salido del camino y tampoco se han tirado un pedo. En todo este transito existencial he conocido seres humanos apasionantes. Jamás me faltaron una labios que besar, un abrazo, y una mano cercana. Me case con una mujer bellísima en la locura de los tiempos y la prisa por casi todo. Pero lo nuestro duró lo que duran dos cubos de hielo en un wiski on the rocks. Pero fue intenso, único. También por culpa de una herencia fui " millonario " durante cuatro años y medio y sentí el imán del dinero y el poder que te da. La cantidad no era mucha, pero en manos de alguien que nunca tuvo nada fue la suficiente para vivir cosas increíbles, viajes fantásticos y dormir en camas de raso con hembras tarifadas. Otras no. Y aquello fue un sueño fugaz y tan real como los números rojos que me quedaron en la libreta. Si tuviera que radiografiarme ahora mismo diría que soy un tipo independiente en extremo. Me gusta estar solo y en soledad. Me apasiona ser observador de cada movimiento y cada palabra de los otros. Eso me ha enriquecido la conciencia y mi manera de actuar ante la vida. No creo en el futuro y no vivo de los recuerdos porque creo que la vida, vivir en definitiva, es todo aquello que pasa por tu lado mientras haces otra cosa. De todas las personas de todos lo seres humanos que he conocido hasta el momento, hay uno que es indescriptible porque no puede ser real aunque exista. Por eso no puedo hablarte de él. Pero si decir que si no hubiera estado ahí, es posible que yo ahora no estaría escribiéndote desde aquí.
Por estadística me quedan veintidós años de vida mas o menos si la enfermedad o el destino adelantado, no me llevan antes a la nada, que es por otra donde iré a parar como tod@s. Por eso voy a intentar que el tiempo que me quede, seguir siendo yo mismo, ese que aprendí a ser tiempo atrás, para seguir. He tratado de actuar coherentemente con mi vida. He dicho lo que sentía y pensaba siempre sin miedo a la critica ni a la imagen, considero que ese es el único argumento por el que merece seguir en este estúpido estado, de vivir para tener que morir. Ser tu en todo caso y saber quien eres y de donde vienes guste a quien le guste. También tengo algo de gilipollas, engreído, prepotente, narcisista, chulo y boca chancla, son algunos de los epitafios que he escuchado sobre mi, directa e indirectamente y posiblemente algo de razón no les falta. Pero al fin y al cabo soy como ellos/as, un ser humano imperfecto. He dejado parte de mi vida en este escrito y si algo me hace reaccionar me encantaría tener la paciencia para construir una historia en forma de libro sobre mi vida. Pero asomándome a la ventana me he dado cuenta de que mi vida no es mas o menos interesante que la de otros o la tuya. Por eso creo que lo mejor es seguir respirando cada mañana hasta concluir el otoño y después andar descalzo por las primaveras, hasta que llegue la niebla que nunca se levanta.
A los 50 me quede sin trabajo por despido de la red de ventas para la empresa que trabajaba y ahora soy perceptor por Derecho de una RGI y aunque no me da para ahorrar ( cosa que nunca hice ) si me da para vivir. Además, las cosas están tan desquiciadas y tan salidas de contexto que los argumentos de muchos es que eres como mínimo sospechoso de algo. Y por supuesto delincuente de todo. Y entonces es cuando uno piensa ¡¡ que honrados son los señaladores ¡¡ . Estoy seguro que son pulcros y ciudadanos de buena conducta que jamás se han salido del camino y tampoco se han tirado un pedo. En todo este transito existencial he conocido seres humanos apasionantes. Jamás me faltaron una labios que besar, un abrazo, y una mano cercana. Me case con una mujer bellísima en la locura de los tiempos y la prisa por casi todo. Pero lo nuestro duró lo que duran dos cubos de hielo en un wiski on the rocks. Pero fue intenso, único. También por culpa de una herencia fui " millonario " durante cuatro años y medio y sentí el imán del dinero y el poder que te da. La cantidad no era mucha, pero en manos de alguien que nunca tuvo nada fue la suficiente para vivir cosas increíbles, viajes fantásticos y dormir en camas de raso con hembras tarifadas. Otras no. Y aquello fue un sueño fugaz y tan real como los números rojos que me quedaron en la libreta. Si tuviera que radiografiarme ahora mismo diría que soy un tipo independiente en extremo. Me gusta estar solo y en soledad. Me apasiona ser observador de cada movimiento y cada palabra de los otros. Eso me ha enriquecido la conciencia y mi manera de actuar ante la vida. No creo en el futuro y no vivo de los recuerdos porque creo que la vida, vivir en definitiva, es todo aquello que pasa por tu lado mientras haces otra cosa. De todas las personas de todos lo seres humanos que he conocido hasta el momento, hay uno que es indescriptible porque no puede ser real aunque exista. Por eso no puedo hablarte de él. Pero si decir que si no hubiera estado ahí, es posible que yo ahora no estaría escribiéndote desde aquí.
Por estadística me quedan veintidós años de vida mas o menos si la enfermedad o el destino adelantado, no me llevan antes a la nada, que es por otra donde iré a parar como tod@s. Por eso voy a intentar que el tiempo que me quede, seguir siendo yo mismo, ese que aprendí a ser tiempo atrás, para seguir. He tratado de actuar coherentemente con mi vida. He dicho lo que sentía y pensaba siempre sin miedo a la critica ni a la imagen, considero que ese es el único argumento por el que merece seguir en este estúpido estado, de vivir para tener que morir. Ser tu en todo caso y saber quien eres y de donde vienes guste a quien le guste. También tengo algo de gilipollas, engreído, prepotente, narcisista, chulo y boca chancla, son algunos de los epitafios que he escuchado sobre mi, directa e indirectamente y posiblemente algo de razón no les falta. Pero al fin y al cabo soy como ellos/as, un ser humano imperfecto. He dejado parte de mi vida en este escrito y si algo me hace reaccionar me encantaría tener la paciencia para construir una historia en forma de libro sobre mi vida. Pero asomándome a la ventana me he dado cuenta de que mi vida no es mas o menos interesante que la de otros o la tuya. Por eso creo que lo mejor es seguir respirando cada mañana hasta concluir el otoño y después andar descalzo por las primaveras, hasta que llegue la niebla que nunca se levanta.
Un abrazo a todos/as
